La clasificación de plástico se refiere al proceso de separar diferentes tipos de materiales plásticos en función de sus propiedades, características o vías de reciclaje o eliminación previstas. Es un paso crucial en el reciclaje de plásticos y los sistemas de gestión de residuos.
La clasificación de plásticos es necesaria porque los diferentes tipos de plásticos tienen propiedades únicas, como la composición de polímeros, la densidad, el color y la resistencia al calor, que determinan su idoneidad para procesos de reciclaje específicos o aplicaciones de uso final. Al clasificar los plásticos, se pueden dirigir al método de reciclaje o recuperación más apropiado, maximizando su valor y minimizando el impacto ambiental.
La clasificación de plástico puede involucrar varias tecnologías y técnicas, incluida la clasificación manual, la clasificación mecánica y la clasificación automatizada utilizando máquinas de clasificación avanzadas . Estos métodos se basan en la inspección visual, sensores ópticos, sensores de infrarrojo cercano (NIR), campos electromagnéticos u otros medios para identificar y separar diferentes tipos de plásticos.
El proceso de clasificación normalmente implica los siguientes pasos:
Recolección: los desechos plásticos se recolectan de diversas fuentes, como hogares, empresas o centros de reciclaje.
Clasificación previa: los contaminantes más grandes o los materiales no plásticos, como metales o vidrio, pueden eliminarse manual o mecánicamente para garantizar que solo los artículos de plástico se procesen más.
Clasificación: los plásticos se clasifican según sus propiedades, que pueden incluir características visuales como el color y la forma, así como propiedades físicas o químicas como la densidad o la composición del polímero. Las tecnologías de clasificación, como la clasificación óptica, la clasificación NIR u otros métodos, se utilizan para identificar y separar diferentes tipos de plásticos.
Desvío: después de la clasificación, los diferentes tipos de plásticos se envían a sus vías de reciclaje o eliminación adecuadas. Los plásticos adecuados para el reciclaje mecánico generalmente se limpian, trituran y funden para producir nuevos productos de plástico. Los plásticos que no son aptos para el reciclaje mecánico pueden someterse a procesos de reciclaje químico o recuperación de energía.
La clasificación eficiente de plásticos es esencial para lograr altas tasas de reciclaje, reducir la contaminación en el flujo de reciclaje y garantizar que los plásticos se procesen correctamente de acuerdo con sus propiedades específicas y capacidades de reciclaje. Desempeña un papel importante en la promoción de una economía circular y la minimización del impacto ambiental de los desechos plásticos.